Crisis financiera y medidas medioambientales: ¿palabras antinómicas?

¿Las preocupaciones alrededor de la crisis financiera van a desviar de los intereses medioambientales en juego?

El 7 de octubre de 2008 los diputados de Europa se pronunciaron sobre una importante legislación para la reducción de las emisiones de CO2 de la UE de 20% hasta 2020.
El peso de la recesión económica amenazaba con dominar la votación del ambicioso programa.

Ayer, favorablemente, los Eurodiputados han enviado un claro mensaje de no subestimar la cuestión sobre el paquete energía y clima. La sesión plenaria del Parlamento Europeo indicó la dirección de la negociación con el Consejo Europeo sobre la legislación. Han elegido mantener la presión sobre los Estados miembros, aunque los Estados se preocupan de la debilidad de la competitividad de la economía.
Los cuotas serán mantenidas para todos los sectores industriales.

Algunos estados, como Alemania, quieren moderar la adopción rápida de medidas ambiciosas. Angela Markel no quiere sostener una política climática imprudente. Para ellos, la crisis económica cambia el orden de prioridad. El argumento es que las empresas tienen que seguir siendo competitivas. Además, algunos políticos están tentado de ignorar la crisis ecológica y el cambio climático para obtener beneficios políticos y económicos a corto plazo.

Se equivocan porque sería más ventajoso para economía mundial controlar el recalentamiento climático con importantes inversiones que asumir el coste del daño engendrado.
La crisis actual es el síntoma de una crisis más profunda del agotamiento de los recursos naturales (petróleo, biodiversidad, agua…)
Hay que adoptar políticas de protección, con enfoques en desarrollo económico y social que tengan en cuenta límites ecológicos para garantizar la estabilidad sostenible de nuestra sociedad.

Era vital que la Comisión Europea no se doblegara ante algunas empresas contaminantes en detrimento de los ciudadanos que quieren mejorar la salud de la economía europea a largo plazo y la de su medio ambiente.
La primera etapa es positiva pero hay que seguir vigilante, las discusiones empiezan.

Con el apoyo de la presidencia francesa, Alemania defiende la industria en el contexto de la crisis. Los debates entre el Consejo y el Parlamento serán vivos. La próxima fecha importante será el 20 de octubre durante el Consejo de Medio Ambiente. Los diputados europeos se pronunciarán en sesión plenaria el 3 y 4 de diciembre 2008.
Veremos si la razón no se deja avasallar por la presión de una economía en crisis.