miércoles, 18 de febrero de 2009

Los conejos madrileños se atrincheran

Hoy he leído una noticia en el periódico El Mundo algo…¿cómica? ¿absurda? Por lo menos me he reído un buen rato.
La verdad es que no he llegado a entender el odio hacia estos animalillos que dan el nombre a nuestra península “Hispania”, pero si no lo leéis, no entenderéis mi asombro.

Dice así un extracto de este artículo escrito por Rafael Jiménez-Simancas: “todo lo que no les mata (a los conejos) les hace reproducirse con elevado éxito de natalidad, parece que no hacen otra cosa que practicar sexo en las madrigueras, que son pequeños agujeros de lujuria y desenfreno. Sin duda que cuando el hombre desaparezca de la tierra quedarán conejos en Torrejón de Velasco, que usarán las vías del AVE para limar esos dientes que nunca terminan de crecer.”

¡Ahora los conejos son animales del diablo, que solo piensan en “party party”! Quien lo diría. Pero hoy en día los animales se están volviendo locos. ¿No será que cada vez estamos invadiendo más sus hábitats y se están volviendo listos y contraatacando? ¿Quién es la verdadera plaga aquí?

Ojala nunca aparezca un radical y diga: “estos humanos destrozan todo lo que ven a su paso, contaminan las aguas y tierras, crean armas que pueden destrozar naciones y se reproducen exponencialmente, planteo que organicemos batidas de caza”. Suena irracional, ¿no? Pues para mi es lo mismo cuando hablan de “controlar” a las “plagas animales”.

Ahora, aquí planteo una posible solución. Si mal no recuerdo, el lince siempre ha estado allí desde tiempos inmemoriales para estabilizar el ciclo natural de crecimiento del conejo (hasta hoy, aunque con números casi irrisorios). Las necesidades mínimas de un lince para garantizar su supervivencia en libertad se estiman en 1 conejo/ha por individuo. Entonces…¿no es esta la solución más lógica?
Mientras en Andalucía están invirtiendo miles de euros en repoblar los campos con conejos para aumentar su número y “ayudar” al lince, aquí en Madrid están buscando una manera de librarse de la plaga de conejos, y no se soluciona como dice Zapatero “comiendo conejo asado”.

Este es el mejor momento para cambiar el destino trágico del lince.
¿Quiénes están a favor de repoblar y así solucionar dos graves problemas que van de la mano? Espero que este comentario de tema para discutir.

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