lunes, 4 de agosto de 2008
Todo el mundo en contra
El primer plan de ahorro energético de España se presentó en 1973, bajo el lema “Aunque usted pueda pagarlo [el derroche energético] España no puede”. Decenas de planes de ahorro y eficiencia de la energía se han sucedido desde entonces, con esta pauta general: se anuncia el plan, a todo el mundo le parece bien, y todo vuelve a su cauce en pocos días, salvo las medidas generosamente subvencionadas, que son las que se ponen en práctica.
Hace unos días, el ministro de Industria (Miguel Sebastián) presentó su lista de 31 medidas “para reducir el consumo energético de España” y, aunque parezca mentira, coniguió poner a todo el mundo en contra. ¿Desde cuando un plan de ahorro energético del gobierno, que tiene la misma capacidad de levantar polémica que un llamamiento papal a la paz mundial, despierta tanta iracundia? Algo está cambiando, amigos.
Por ejemplo, el diario ABC calificó el discurso de Sebastián de “castrista”, por la medida anunciada por el ministro de sustituir millones de lámparas convencionales por versiones de bajo consumo. En general la derecha piensa que la lista de 31 medidas, bastante inocentes en su mayoría, no son más que una expresión del totalitarismo y estalinismo propio del zapaterismo.
El plan Sebastián presenta como principal novedad el énfasis en unir el ahorro y la eficiencia energética con la mejora económica y social del Estado, en lo que se califica ya como “patrotismo energético”, con frases como “Cada vez que cogemos el metro o reducimos el aire acondicionado hacemos algo por nuestro país”.
Dada su escasa dotación económica, su impacto principal pretende ser cultural: aquellos que conducen a toda velocidad, o los que nunca usan el transporte público, o los que ponen el aire acondionado a temperaturas árticas, o los que todavía tengan anticuadas bombillas de filamento, serán mirados como apestados por los buenos ciudadanos, igual que hoy está mal visto escupir en la calle (claro que también podrían ser mirados como héroes, si se produce el clásico vuelco del ciudadano irritado contra “los políticos” y contra todo lo que proponen).
El tiempo dirá si este famoso plan consigue algo, pero es muy buen síntoma que todo el mundo esté en contra. Los conductores se llevan las manos a la cabeza, invocando su sagrado derecho al desplazamiento rápido, la derecha reclama centrales nucleares en vez del “bucle melancólico de las fuentes naturales”, un columnista profesional afirma que las lámparas de bajo consumo “dan menos luz que un plátano colgado de una cuerda”, la apuesta por los coches eléctricos “es arriesgada”, el plan es “de juguete”, según El País, El Mundo duda que la reducción de la velocidad del tráfico pueda ahorrar 350 millones de toneladas de petróleo (no les falta razón, porque el consumo de petróleo de España en un año es sólo de 70 millones de toneladas), y así sucesivamente. Al final, hasta puede que este enésimo plan de ahorro de energía del gobierno sirva para algo.
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Si, amigo Lafuente, cualquier manifiesto y medidas que tiendan a frenar el derrochismo consumista, sea de lo que sea, y máxime de energías contaminantes y no renovables, ¡BIEN VENIDAS SEAN!. Pero el "regalito" de la bombilla tratando de paliar una situación cuyuntural de elevado precio de la energía y el "regalito" preelectoral de los 400€ para otra, aunque estén relacionadas. Afortunadamente, para la ciudadanía no logran bloquean la sensación general de que en España falta inteligencia planificadora en acción y sobra propaganda gubernamental mezquina y oportunista.
ResponderEliminar¿Y en lugar de criticar, cosa que veo lícita, aunque poco productiva y sí muy oportunista, cuales son las soluciones que aportais?
ResponderEliminarFelipe.
Opino que los comentarios que se reciben en el blog, deberían ser aceptados o rechachados, según el criterio del censor. Pero si son aceptados, habría que aceptarlos sin alteraciones o recortes. De lo contrario no tiene ningún sentido solicitarlos. Usted mismo podría hacerlos a su gusto y manera.
ResponderEliminarNota de los editores: Los comentarios en este blog no son censurados ni modificados de ninguna manera. Sólo se rechazan aquellos que resultan completamente ilegibles.
ResponderEliminarEn primer lugar: Me adhiero al comentario del tercer comentario anónimo. Si quereis que se conozcan las opiniones de los lectores, democráticamente hablando, no es saludable censurar los comentarios que se reciban.
ResponderEliminarEn segundo lugar, es indudable la mucha razón del primer comentario anónimo "en España falta inteligencia planificadora en acción y sobra propaganda gubernamental mezquina y oportunista" a lo que cabe agregar que a lo mejor sí hay inteligencia planificadora en acción, pero que tal vez responde a intereses ajenos al bienestar global de la comunidad, lo que seria mucho más grave y censurable todavía.
Por otro lado, ya que se ofrece la oportunidad de expresar alguna idea para sugerir alguna alternativa relacionada con el consumo de energía contaminante y el calentamiento atmosférico, mi propuesta es que la población en general debe demandar a las autoridades que inviertan verdaderos esfuerzos y dinero "seriamente" para propiciar el desarrollo masivo de la conversión del agua en sus partes componentes para ser utilizados como combustible no contaminante -hidrógeno+oxigeno- que como todos vosotros sabéis, al combustionarse generan mucho mas calor y energía que que la combustión de los hidrocarburos y su residuo lejos de ser contaminante, es sólamente AGUA.
"El combustible perfecto", inagotable, ecológico como el que más.
Pero con una pequeñisima contra. ES GRATIS. lo que condena a todos los tíos dueños del Petróleo a dejar de envenenar la tierra. Cosa para la cual son verdaderos especialistas.
Demás está decir que adoptar esta fuente de energía permitiría aprovechar todo el parque autumotor tal y como está, con adaptaciones mínimas porque al tratarse de un combustible gaseoso, funciona idénticamente al sistema GNC.
Se obtiene de la electrólisis del agua, se puede almacenar en tubos o garrafas a presión o bien, se pueden construir kits para su instalación directa en cada aplicación: Llamese vehículo, caldera, usina térmica, etc. etc. y los depositos de combustible llevarían una muy segura carga de AGUA. reduciéndose los riesgos de incendios, explosiones y accidentes derivados del transporte, uso y almacenamiento de combustibles.
Lo que hay que tener en claro es que si la población no reclama que se implemente un "Plan de reconversión energética" ahora mientras no hay demasiado apuro, los políticos seguirán aprovechando "los altos precios del petróleo" para incrementar sus ganancias personales y cuando se produzca la verdadera emergencia de reconvertir los sistemas, se va a generar un verdadero caos, producto nada más ni nada menos que de la imprevisión y de la especulación.
Yo creo sinceramente que es una lección que ya deberíamos haber aprendido.
A todo esto. Es bastante más sencillo que muchas de las tecnologías que usamos SIN EL MÁS MŒNIMO ASOMBRO frecuentemente a nivel doméstico. Sólo falta la DECISIØN POLITICA DE QUERER HACERLO. Piénsenlo.
el comentario número cinco es anónimo como creo que son todos los demas solamente porque la pagina no toma los nombres de usuario. Tal vez sea una estrategia de los editores para desembarazarse de cualquier posible reclamo de autoría de los comentarios, o que simplemente se trate de una falla en la confección de la misma. De todas maneras, de no subsanarse a la brevedad este inconveniente os auguro escaso éxito en vuestra interacción con los lectores.
ResponderEliminarComo demuestra esto que estáis leyendo, si el que escribe un comentario selecciona la opción de Nombre/URL dejará de ser anónima la intervención. Así queda claro que los autores del blog no están censurando nada y que el sistema ofrece la posibilidad de que los autores de los comentarios se oculten líbremente bajo el título de Anónimo. ¿Desde cuando el permitir expresarse sin identificación es una estrategia?
ResponderEliminarCompletamente de acuerdo con Miguel. Yo también me he identificado sin problemas. Aquí el el que no se identifica es porque no quiere dar la cara (opción muy legítima) o no sabe usar Internet (opción muy probable).
ResponderEliminarEl hidrógeno, como combustible, no es una alternativa que pueda suplir al petróleo manteniendo el ritmo de consumo actual: el procedimiento para conseguir el hidrógeno (hidrólisis) consume mucha más energía de la que ese hidrógeno nos dará.
ResponderEliminarSe podría producir hidrógeno en plantas solares, eólicas, hidroeléctricas, etcétera, en momentos en que la producción es superior a la demanda. Así sería razonable... pero resulta que somos un país deficitario en energía, tenemos que importar un montón de petróleo.
Así que no tenemos un excedente de energía para hacer hidrógeno. Ríete tú de los precios de la gasolina o el gasóleo: llenar el depósito de hidrógeno, sólo estaría al alcance de los ricos.
De todas formas, es el modelo entero de economía (basada en el hiperendeudamiento y el hiperconsumo) lo que se está derrumbado, por no ser sostenible. No hay recursos suficientes para tanto consumo, y hemos estado consumiendo muy por encima de nuestras posibilidades...
Así que el hidrógeno puede ser una solución, pero sólo para unos pocos.
Creo que el modelo imperante de transporte, que prima el coche, está tocando a su fin. Y en parte me alegro de que sea así, porque, si no, en poco tiempo dejaríamos de tener un planeta habitable para el ser humano. De hecho, ya estamos sufriendo el cambio climático.
Ojalá aprovechemos la crisis para crear una sociedad menos contaminante, con un consumo energético eficiente. Una sociedad mucho más racional y enfocada hacia el ser humano (no hacia el consumismo desaforado).