miércoles, 26 de noviembre de 2008

La psicología contra el coche eléctrico


El viernes próximo el ministro de Industria, Miguel Sebastián, se reunirá con representantes del grupo PSA Peugeot-Citröen, propietario de una enorme fábrica de automóviles en Vigo, y sobre la mesa estará el coche eléctrico. Suena muy bien eso de fabricar coches eléctricos en grandes cantidades.

No obstante, creo que se está olvidando un factor esencial en esto de la popularización del vehículo eléctrico: el factor psicológico-social. En una sociedad donde los anunciantes de coches han llegado a extremos increíbles de refinamiento comunicacional (ya nadie compra un vehículo, compra un concepto, un estilo de vida), ¿qué puede ofrecer un coche eléctrico? ¿quién compraría un coche eléctrico?

Un reciente anuncio de una gran marca dice: “Discúlpanos. Hemos estado observando tus sueños”. Bajo la foto de un vehículo que parece una mezcla bruñida entre un carro de combate y un Fórmula Uno, se detallan las carácterísticas de “tus sueños”: el equipamiento deportivo más completo y 190 CV de potencia.

Ahora imaginemos el anuncio de un coche eléctrico: “Bueno para ti, bueno para el planeta” “Siente el placer de moverte en coche sin hacer daño a nadie” “Los animales del bosque te agradecerán la compra de este coche”, y así. Y seguro que la foto del anuncio muestra una especie de carrito rechoncho e inofensivo. Así no vamos a ninguna parte, al menos en ventas. Avisados quedan los adalides del coche eléctrico.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Agradecemos tu colaboración en nuestra bitácora.
Difunde y pon a prueba tus ideas escribiendo un comentario.
Puedes dejar tu opinión de forma anónima seleccionando el botón que hay encima de "publicar comentario"